Objetivos personales. No hay viento favorable para el que no sabe hacia dónde va

Objetivos personales. No hay viento favorable para el que no sabe hacia dónde va

Si queremos que nuestra vida sea satisfactoria tiene que tener una razón de ser de la misma, es decir, un sentido y un significado. 

Para ello necesitamos objetivos claros, que hay que conseguir y que son el éxito y la satisfacción del mañana.

El dotarse a uno mismo de objetivos personales (ya sean profesionales o privados) es reanudar con nuestra más profunda motivación, es conectar con la fuerza interior. 

Significa, también, saber lo que uno quiere y hacerlo saber (de la forma más adecuada), promulgarlo y, si no se sabe cómo actuar, consultarlo con un psicólogo profesional para aclarar las ideas. 

Esto hace posible el asumir activamente la dirección, el equilibrio en la vida y las distorsiones existentes entre aspiraciones y realidad.

La creatividad necesaria para fijarse un objetivo conlleva un estado de tensión que permite pasar de la situación presente a lo que se desea. Esta tensión creadora es la que ayuda después a movilizar nuestros recursos para realizar estos objetivos.


Un objetivo de dirección se define de forma: 
  1. Realista
  2. Que se pueda medir y cuantificar
  3. En un plazo de tiempo preciso
  4. Expresado en términos de acción concreta.

La validez de un objetivo se mide por la atracción y la fuerza del deseo que este despierta en uno mismo. Todo aquello que se emprende con deseo se vera realizado con mayor facilidad. 

El deseo será el motor de la acción, pero antes hay que reconocer las limitaciones y nuestras frustraciones y limitaciones internas

Contra ejemplo: las decisiones y los llamados buenos deseos, demasiado conceptual izados y carentes de elementos concretos para poder implicarnos y movilizarnos.

Felicidad

El logro de estos objetivos depende del grado de adecuación que tienen con nuestra vida. Para ello se requieren tres condiciones:
  • Querer "viviendo íntimamente ese anhelo" con el convencimiento de que el objetivo es válido y que, además puede alcanzarse.
  • Saber cómo hacer y conocer las etapas físicas, emocionales e intelectuales que entrarán en juego para la realización de este objetivo.
  • Saber negociar de manera eficaz con todo lo que pueda interferir, inclusive nuestras propias resistencias.
  • Se puede afirmar que en la definición de los objetivos se encuentran reunidas las condiciones de su realización efectiva.

TUS OBJETIVOS PERSONALES ... ¿CÓMO?

Cuando intentas definir los objetivos personales (profesionales y privados) puedes encontrarte ante dos obstáculos. 

"El primero consiste en reproducir mecánicamente el presente en el futuro". 

En ausencia de una visión clara, uno se limita a aceptar las cosas tal como se presentan esperando que la cosa irá bastante bien o por lo menos no demasiado mal. 

En este caso el futuro carece de una perspectiva de evolución creadora, y uno mismo se priva de poder dirigir el curso de los acontecimientos. 

Por supuesto, uno mismo piensa que es realista, pragmático. Aquí no hay lugar para el entusiasmo. 
¿Qué es lo que falta?. El entusiasmo en sí mismo: la inspiración, el deseo, el significado, la motivación, etc...

Saber vivir

Por el contrario, el segundo obstáculo consiste en lanzarse a una utopía excesiva sin tener en cuenta la realidad. 

Es dejarse llevar por las quimeras, aquellas que llanamente, el sentido común acuña con expresiones tales como hacer castillos en el aire, el cuento de la lechera, vender la piel del oso antes de cazarlo. 

¿Qué falta?: Sentido de la realidad.

El camino correcto consiste en conjugar utopía con realismo, corazón y razón; intuición y pragmatismo. 

El proceso de reflexión que te proponemos se estructura en cinco perí­odos:

  • ¿Qué haces para fijarte un objetivo y poder alcanzarlo?. Las habilidades que posees en el tema y que necesitas más adelante para definir el objetivo prioritario para el próximo año.
  • ¿Cual es tu punto de partida? Tu vida hoy en día: foto en blanco y negro. Según tu criterio, ¿que es aquello que te dispone a dar lo mejor de ti mismo?. 
  • Tus valores personales son la condición sine qua non de tu entusiasmo (el estado en el cual el individuo impulsado por una fuerza superior se siente capaz de crear. 

Superación personal

El duende interior que posibilita todo.
  • ¿Qué quieres hacer evolucionar? Desde los valores que te mueven ¿sobre qué aspectos de tu vida quieres actuar, en que sentido, en qué medida? Estos son tus objetivos personales (profesionales y privados) a largo y medio plazo.
  • ¿Eres verdaderamente realista? 
  • ¿Tu objetivo prioritario para el año que viene, pasa por la criba de las preguntas clave en cuanto a la forma en la que lo concibes y lo defines, para conseguir facilmente su realización? (El proceso que aquí se sigue se puede reproducir para cada tino de tus objetivos).

Este proceso de reflexión con el que has realizado esta experiencia, te supondría al final una herramienta personal que te permitirá reiniciar este tipo de reflexión con toda autonomía, en cualquier momento en el que sientas la necesidad.

Un objetivo personal puede ser cualitativo. 

No se traduce obligatoriamente en una lista de acciones consecutivas, sino más bien en idea global (en el sentido de los hábitos personales) de acciones convergentes y destinadas a guiar el dí­a a dí­a. 

Incluso en este caso es acertado fijarse un plazo para conseguir el objetivo deseado.... Ello fortalecerá la motivación y la atención.

El dotarse a uno mismo de objetivos personales (ya sean profesionales o privados) es reanudar con nuestra más profunda motivación, es conectar con la fuerza interior y, si es necesario, plantearse una terapia personal.

Significa, así mismo, saber lo que uno quiere y hacerlo saber (de la forma más adecuada), promulgarlo. 

Esto significa asumir activamente la dirección, el equilibrio de vida y las distorsiones existentes entre aspiraciones y realidad. 

Vivida esta iniciativa nos incumbe sólo a nosotros.
Nadie puede emprenderla por nosotros.
Con la tecnología de Blogger.